Proyecto Comunitario Granjita Feliz cumple 7 años

por | 7 octubre, 2020

Con seguridad muchos han escuchado del Proyecto Comunitario Granjita Feliz, y otros tantos conocen de su amplia labor en favor del medio ambiente, de la agricultura familiar urbana en pequeños espacios, del desarrollo social y cultural, en su más amplio concepto de la inclusión.

Sobre cómo surge Granjita Feliz y sus precendentes, nos cuenta Luis Darío Martos:

“La idea surge el mismo día que al Conejal Granjita Feliz se le otorgó la condición de Excelencia por parte del Grupo Nacional de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar del Ministerio de la Agricultura, el 2 de marzo del 2013, aunque la materialización del proyecto fue el 6 de octubre del propio año».

En el año 2010, el matrimonio conformado por Luis Darío Martos y Elizabeth Frómeta (Lisy), desarrollaron en la terraza, frente a la sala de su vivienda en el centro de la barriada de Guanabacoa, un área de plantas ornamentales con diferentes especies, que se convirtió en un verdadero jardín de estar.

Unido al cariño de Lisy por los conejos y por sugerencia y regalo de un amigo agricultor, criador de conejos, iniciaron la crianza de esta especie con la pareja obsequiada.

Darío con sus posturas de fresas. Foto: Granjita Feliz

Así, en 13 jaulas dispuestas en el pequeño espacio de 25 metros cuadrados, en la segunda planta de un edificio multifamiliar, logran tener un promedio de 120 a 150 conejos de todas las categorías. Al conejal “ desde el primer día le pusimos Granjita Feliz, por el simple hecho de creernos una pequeña granjita urbana y que siempre estaría llena de felicidad para dar y recibir amor, como reza en el cartel en la puerta de la escalera que da acceso a la casa”.

Tras una visita de la Delegación Provincial de la Agricultura y de la Granja Urbana Municipal, recibió el patio conejal Granjita Feliz la condición de Excelencia. A partir de ese momento, el matrimonio decidió convertir la terraza conejal en un proyecto comunitario, con talleres de cunicultura y de artes plásticas, los que ya realizaban de forma limitada con algunos niños del barrio.

“Sólo el amor engrendra la maravilla, sólo el amor consigue encender lo muerto”

El 31 de marzo, junto con la publicación de un reportaje en Tribuna de La Habana sobre el conejal, el querido, inquieto y soñador Darío, sufrió un infarto cardiaco. “Lisy asumió la crianza de los conejos con la ayuda de su hijo becado, mientras yo aguardaba en cama recuperándome de las 3 operaciones realizadas, ella tuvo que atenderme a mí, a la casa, el conejal con todo lo que implica de esfuerzo físico para una mujer, gestionar y tratar el pienso, alimentar los conejos, codornices, desinfectar; quería al menos disminuir la cría, pero me dijo que no, que mis sueños se cumplirían todos, que ella asumía”

“El amor por mi esposa y el deseo de materializar la idea del proyecto, del que públicamente había hablado en un evento de Ciencia y Técnica en la Cooperativa Daniel Hernández, nos llevó a realizar aquel 6 de Octubre del 2013 la primera edición del Guateque Dominical de Granjita Feliz (a 2 meses de mi última intervención quirúrgica), constituyendo la primera actividad pública del Proyecto Comunitario”.

Nexos de Granjita Feliz …

Granjita Feliz es un proyecto de educación ambiental para la sustentabilidad, promueve y desarrolla una alimentación sana, limpia y justa. Por la defensa de estos conceptos se afilian al movimiento Slow Food como Conviviums, tienen inscritos en el Arca del Gusto (catálogo que recoge miles de productos tradicionales en peligro de extinción de todo el mundo) las avejas miliponas y el conejo semi gigante. Son además miembros de la red Iberoamericana de Medio Ambiente (REIMA) a propuesta del Centro de Educación Ambiental de la Universidad de Ciencias Pedagógicas Enrique José Varona (UCPEJV) y del órgano de base Madre Tierra de la ACTAF.

Jóvenes discapacitados con las acelgas cosechadas. Foto: Granjita Feliz

Cómo se vinculan con los jóvenes discapacitados y menores con cáncer …

“El Proyecto, a 4 meses de su creación, había desarrollado y consolidado su Guateque Dominical en la Casa de Cultura de Guanabacoa, donde también se realizaba el Taller de Artes Plásticas “Galería de los Felices”. En esa ocasión dos madres de pequeñas Down que circulaban por la calle se detuvieron a ver la actividad y preguntaron si también las hacían para niños especiales. Le respondí que no, pero que a partir de ese momento las iniciaríamos”.

A través de ellas, se acercan al Centro Socio Cultural del Romerillo lanzando una convocatoria para iniciar así, el espacio “Sueños Conquistados” el 23 de marzo del 2014 con con una dinámica actividad cultural, para unos pocos niños de Guanabacoa y otros del resto de La Habana.

A partir de ese día comenzamos a localizar, por medio de las áreas de salud, a las personas con discapacidad intelectual (especialmente Down y autistas), retraso mental, discapacidades sensoriales (sordos, mudos, ciegos y débiles visuales) y físicas. A estas actividades, con una frecuencia mensual, inicialmente llevábamos artistas profesionales y aficionados, hasta el momento que descubrimos las potencialidades artísticas de las personas con discapacidades, los adiestramos y constituimos con ellos la Compañía Artística “Sueños Conquistados”.

Con ellos también desarrollan desde hace 4 años y medio un taller de Agrobiodiversidad en el huerto “El Garabato”, espacio para desarrollar actividades físicas, juegos, labores agrícolas, manualidades y prácticas culturales, dos veces por semana.

“Unidos por Ti” es una ayuda alimentaria que iniciaron hace 6 años para niños con cáncer, les entregan una canasta variada con hortalizas, vegetales, viandas, cárnicos, lácteos y otros productos donados por agricultores, cuentapropistas y otras personas jurídicas y naturales que les colaboran.

Canastas para la ayuda «Unidos por Ti». Foto: Granjita Feliz

La Covid -19, les ha hecho disminuir la cría de animales, no así con las producciones del Huerto El Garabato …

A consecuencia de la COVID-19 dejamos de producir conejos y codornices, dejando solo unos pocos para el hogar; sustituimos la lombricultura por el compost porque resulta imposible la búsqueda de alimentos en el campo debido al distanciamiento y aislamiento social. Mantenemos 4 colmenas de abejas de la tierra (meliponas) y reordenaremos la terraza conejal nuevamente después de que se inicie la nueva normalidad.

En estos momentos la razón del proyecto es el Huerto El Garabato, hoy producimos lechugas, acelgas, habichuelas, berenjenas, espinacas, cebollino, ajo de montaña, plátanos, variedades de ñame, ají chay, cachucha, zanahoria, rabanito, todas las variedades de oréganos, estragón, romero, sábila, maíz, manzanilla, tilo, frijol caballero, frutabomba, cúrcuma, rúcula, además de otros frutales en producción y desarrollo, junto con otras plantas aromáticas, condimentosas, ornamentales, semilleros de cilantro, culantro, apio y otros, además de iniciar nuevamente el proceso de reproducción de posturas de fresas para la temporada que ya casi inicia.

Huerto «El Garabato». Foto: Granjita Feliz

El mayor impacto en la sociedad del trabajo que realizan …

“Demostrar que sí se puede desde lo local ir a lo territorial, a lo regional y al mundo. Muchas personas siguen nuestro paradigma de trabajo en las diferentes modalidades o dimensiones del proyecto; universidades y grupos de estudiantes de altos centros de estudios de Cuba y países europeos nos han visitado, compartiendo experiencias, propiciando espacios de diálogo y de aprendizajes. Nuestro impacto mayor es el vínculo con las personas más necesitadas de apoyo social, sacándolas del ostracismo y llevándolas a ser protagonistas de la transformación social en función de mayor corresponsabilidad social, donde los diferentes son iguales y deben ser tratados con respeto y amor”.

Muchos han sido los premios y reconocimientos obtenidos por este «dúo explosivo», por así decirles, por su gran altruismo, voluntad, esfuerzos, creatividad, amor, ayudando a muchas personas; así como también otras muchas personas los ayudan a consolidar las diferentes acciones del Proyecto Comunitario Granjita Feliz.